Ray Guevara reclama un presupuesto razonable para Tribunal Constitucional

JUSTICIA|11 DIC|POR FEDERICO MÉNDEZ| DIARIO LIBRE
Ray Guevara reclama un presupuesto razonable para TC
Advierte que el TC no puede ser sometido a súplicas de PE y PL


SANTO DOMINGO. El presidente del Tribunal Constitucional, Milton Ray Guevara, advirtió que es hora de reivindicar el respeto absoluto a la autonomía e independencia presupuestaria de los tribunales ordinarios y de esa alta corte.

Planteó que el poder jurisdiccional instaurado por la Constitución del 2010 e integrado por el Poder Judicial, los tribunales Superior Electoral y Constitucional, es de control "y mal podría ejercer su función-que el constituye le ha otorgado- si no cuenta con los recursos económicos suficientes para desarrollar a cabalidad sus labores".

Al pronunciar la conferencia "La Declaración Universal de los Derechos Humanos: Visión del Siglo XXI", auspiciada por el Consejo Dominicano de la Unidad Evangélica (Codue), consigna que la Ley 194-04 establece que el Presupuesto del Poder Judicial y el Ministerio Público será de por lo menos un 4.10% de los ingresos internos, incluyendo los adicionales y recargos establecidos.

"A este 4.10%, hay que agregarle un presupuesto razonable al Tribunal Constitucional".

En su caso, el magistrado puntualizó que se trata de una jurisdicción en proceso de construcción institucional que debe ser rodeada de las garantías legales, financieras y presupuestarias necesarias para que pueda ejercer su elevada misión de garantizar la supremacía de la Constitución, la defensa del orden constitucional y la protección de los derechos fundamentales. "El Tribunal Constitucional no puede ser sometido a un proceso de súplica ante los poderes Ejecutivo y Legislativo, para que se respete su autonomía presupuestaria".

Consideró que ello desvirtuaría las bases del Estado de Derecho y sembraría en la comunidad nacional e internacional dudas sobre el compromiso de los poderes públicos.

Reconoció los notables avances logrados por el país en cuanto al reconocimiento de las libertades públicas. Sin embargo, dijo que esto no es suficiente, ya que la garantía más absoluta es la aceptación voluntaria.